miércoles, 4 de agosto de 2010

AMOR O DEPENDENCIA




Muchas personas llaman amor intenso a la necesidad neurótica del otro (pareja o ex) hasta tal punto es asi que perciben la falta de dicha necesidad por el otro como ausencia de amor. Nada mas alejado de la realidad; de hecho suele amar mas quien “menos necesita” ya que si siente amor será de verdad sano.
PARA DESCUBRIR EN NOSOTROS EL AMOR, LO PRIMERO ES AMARNOS A NOSOTROS MISMOS” Rojas, Marcos.

Esta frase, tan repetida, habla de una vieja quimera deseada por todos: la autoestima; pero lo cierto es que, en ocasiones confundimos su falta con el amor.
El amor neurótico patológico, es propio de personalidades inmaduras, inseguras y faltas de autoestima que han proyectado en el otro, su propio valor, es decir, su propia estimación. Dependen de lo que les valore la otra persona. Por eso cuando el sano rompe la relación el neurótico no lo puede soportar, se hunde, se deprime, pierde el interés por todo, ya que al pensar que nos sirve para nada no tiene sentido para (él o ella) esforzarse en nada, pues nada puede conseguir por sí solo.
Para ilustrar mejor este proceso distingamos entre “necesitar a alguien porque se le ama” y amar a alguien porque se le necesita”, lo primero es lo deseable y es normal que cuando nos separamos nos encontramos tristes y ansiosos. La exacerbación de estos sentimientos (depresión, histeria), ocurre con lo segundo (amarle porque se le necesita) y se da en el amor neurótico.
El dependiente no pasa página , no se libera del apego, tiene un pensamiento monotemático y llega a agobiar, perseguir, amenazar, insultar, maltratar (física y psicológicamente) o chantajear emocionalmente a su ex para que vuelva con él a toda costa, a la fuerza (el maltratador piensa que si no es por la fuerza ella no estaría con el) y en casos extremos a asesinar a su ex, porque para él, es la dueña de su autoestima.
De ella depende que él sea valioso, así que “si no está conmigo es porque no valgo”; esto puede desembocar en el deseo de eliminar a quien “le quita su valor como persona”.
Ningún ser vivo aparte del hombre tiene problemas de autoestima. La autoestima es constructiva, integradora, amorosa, joven y fresca; es un sentimiento que regala afecto placentero para sí mismo y para los demás; es una sensación de compañía eterna y seguridad.
“Todos los seres humanos ideamos algún mecanismo que nos permite, al despertarnos cada mañana, estar seguros que somos la misma persona que se fue a dormir la noche anterior”
GORDON W. ALLPORT
Para los que no saben estar solos, para los dependientes, es mayor el temor a la soledad que la conciencia de estar acompañados a la fuerza. Porque ¿Qué persona sana desearía que alguien estuviese con él por obligación?
Las emociones que no siguen el curso adecuado para desarrollar el potencial interior que todos tenemos nos impulsan a quebrantar lo más grande de nosotros mismos.
No podemos amar si NO nos sentimos libres; si no podemos convivir con un amor manipulado repleto de pactos y mercantilista.
El amor te desarrolla, te enseña, te potencia, te quiere, te aprecia, te reconoce, te admira. El amor es lo único que mueve al mundo , y a quien no consigue llevar esta obra de arte, nacida de nosotros mismos, al puerto de la felicidad, más le valdría reflexionar sobre sí mismo y dejar la oportunidad de compartir este sentimiento con otra persona hasta que consiga liberar estos comportamientos y adentrarse en sí mismo de manera profunda, desarrollando la inteligencia emocional que todos llevamos dentro.
Para todo y para terminar quiero decir que la pareja es integradora y que el primer paso para que la relación llegue a ser el reflejo de nosotros mismos es potenciar los aspectos positivos que llevamos dentro.
Quienes tienen lástima de sí mismos, hacen daño a los demás. Es la tiranía de los débiles.
EL AMOR ES UN REGALO, NADA TENEMOS QUE PAGAR POR SENTIRLO O POR VIVIRLO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Agregue su sugerencia